María Germade es restauradora. Boris Dovao, ingeniero técnico. No se conocen, pero tienen en común que han retornado hace poco a Galicia. La primera desde Irlanda; el segundo, desde Argelia. Los dos buscan cumplir su sueño y para eso han montado su propio negocio. Germade, un taller de enmarcación y restauración en Cangas. Dovao, una tienda de productos delicatessen en Pontevedra.
Desde hace tres años, la Xunta, a través de la Secretaría Xeral da Emigración, ayuda a los emigrantes retornados que quieren poner en marcha su propia empresa. En este trienio el presupuesto que ha manejado ha sido de 350.000 euros. Estas subvenciones, con un tope máximo de 8.000 euros por solicitante, son compatibles con las que ofrece la Consellería de Traballo. Es más, el objetivo de estas ayudas es que sirvan de reclamo para conocer las que ofrece esta consellería para todos los gallegos.
Fuente: La Opinión A Coruña
No hay comentarios:
Publicar un comentario