Mucho antes de que ministros, conselleiros y analistas empezasen a machacar con su discurso a favor de la innovación para salir de la crisis, los fundadores de las cinco empresas gallegas seleccionadas como finalistas en la sección gallega de los premios EmprendedorXXI „que organiza La Caixa con la colaboración de la Xunta y la Empresa Nacional de Innovación (Enisa) del Ministerio de Industria, ya germinaban la semilla de negocios con una enorme proyección internacional. Tres de esos cinco finalistas son empresas surgidas de la Universidad, especialmente, de la de Santiago, como spin off de proyectos de investigación de alto nivel. Es el caso de la ganadora del certamen, Situm, regentada por tres doctores en robótica e inteligencia artificial que rondan la treintena y ya sorprenden a fabricantes de alta tecnología de Estados Unidos, entre otros países.
Son algunas de las jóvenes promesas de la innovación en Galicia que trabajan en proyectos aplicados a la sanidad, la cosmética, el textil, los servicios o las tecnologías de la información y que La Caixa reunió el miércoles en Vigo para la entrega de un premio dotado de 5.000 euros que abre al ganador la vía a participar en la fase nacional (de 20.000 euros) de uno de los galardones de referencia en el campo de la innovación empresarial en España. Coinciden en que montar una empresa hoy sigue siendo todo un reto, y que sobre todo lo que sigue fallando es la financiación, a menudo únicamente sostenida con los ahorros de cada socio.
La muestra de que en Galicia hay cantera en innovación la dio el año pasado la start up coruñesa Torus, que diseñó un acelerador de aplicaciones informáticas para uso financiero, y ganó el certamen gallego y nacional. Nacida en la Universidade da Coruña con el apoyo del fondo de Ciencia de la Fundación Barrié, Torus fue seleccionada este año por Accenture como una de las siete start ups más innovadoras del mundo en servicios financieros.
Fuente: Faro de Vigo
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